El aburrimiento es imposible en la era digital, y la protagonista del corto lo demuestra abriendo simplemente su ordenador e internándose en realidades alternativas y mundos surrealistas.
Inspirándome en el estilo de A24 tan de moda en redes y en «filmtok», he usado sobre todo la edición para compensar limitaciones de escenarios abiertos y espacios donde grabar. El mayor reto ha estado en la iluminación, aspecto donde tenía carencias y he tenido que practicar bastante para conseguir un resultado presentable.
Por otra parte, el uso de un trípode me ha ayudado en la difícil tarea de grabarme a mí misma, aunque he tenido muchos problemas al hacer ciertos planos (sobre todo el cenital).
¡Espero que os guste!